-Por el filósofo Manuel Fernández Espinosa
LA FILOSOFÍA Y EL SEÑOR MINISTRO DE SANIDAD SALVADOR ILLA ROCCA
En todo esto de la crisis sanitaria leemos y escuchamos por doquiera decir que D. Salvador Illa Rocca es «filósofo» y, aunque me venía molestando tanto dale con eso, ya me he hartado.
Los detractores del gobierno remarcan, subrayan, enfatizan el título de Licenciado en Filosofía del ministro Illa para destacar que su formación universitaria no está acorde con el ministerio en que funge. Yo no vengo ni a desacreditar al ministro ni tampoco a defenderlo, pero sí que quiero defender a la Filosofía de este nuevo ultraje que se le hace, pues la Filosofía es, en gran medida, el sentido de mi vida y tengo que decir dos cosas:
1°) Haber obtenido la licenciatura, el grado o incluso un doctorado en Filosofía no hace filósofo a nadie. De una Facultad de Medicina salen médicos, pero de una Facultad de Filosofía salen licenciados en Filosofía, casi todos abocados a un incierto destino laboral en la docencia, pero -repito- no necesariamente salen filósofos. El filósofo puede no haber hecho la carrera de Filosofía, valga por ejemplo Ludwig Wittgenstein, uno de los filósofos más importantes del siglo XX: Wittgenstein nunca fue Licenciado en Filosofía.
2°) Basta hacer una somera investigación sobre el ministro Illa para ver que, en el currículo profesional del ministro de Sanidad, el Señor Illa también fue Alférez y tiene en su haber un Máster en Economía y Dirección de Empresas por el IESE de la Universidad de Navarra (del Opus Dei, por cierto).
¿Por qué esos que continuamente están machacando con que el ministro de Sanidad es «filósofo», no le llaman «Alférez»?
¿Por qué no destacan que también estudió Economía y Dirección de Empresas? ¿O que fue Alférez? ¿O concejal? ¿O Alcalde?
Ya, eso no interesa, pues lo que interesa es que, mientras desacreditamos al Ministro de Sanidad, podemos desacreditar también a la Filosofía, a los filósofos y a los licenciados en Filosofía… Pues a ver si leen algún libro de Filosofía para no ser tan ceporros.
Puesto que con ello, los que se emperran en llamarle «Filósofo» al Ministro de Sanidad, simplemente demuestran que no tienen ni puñetera idea de que:
1) A la Filosofía le debe nuestra Civilización todo lo que la ha hecho prevalecer en el mundo.
2) La Facultades de Filosofía no dan Filósofos: en el mejor caso dan licenciados, graduados o doctores que seguro que conocen, más y mejor que un puñetero periodista, la Historia de las Ideas, aunque no sean Filósofos y les quede grande un Ministerio de Sanidad.
He dicho.