SANTIAGO POR LOS ANDES
Tributo a José Antonio Pancorvo Beingolea QEPD
Hijo del Trueno, apóstol ecuestre,
en la batalla de Clavijo, tu espada
fue luz y cruz de guía,
de Castilla contra los moros.
Pasaron los siglos,hasta que
se confirmó la Reconquista,
y fue con Granada en el blasón,
que el Atlántico se hizo Mare Nostrum,
y el Extremo Occidente se hizo Atlántida,
y del Caribe se fue hacia el norte y hacia el sur,
siendo la hora de Cristo en el Nuevo Mundo,
plantando la cruz de Borgoña en el sol de los Andes.
¡Oh, espíritu henchido de fe, grandeza,
trabajos y aventuras! Pronto una iconografía
propia surgió en la flor y nata de las Indias,
de Quito a Cusco, ante el mundo.
¡Santiago! ¡Santiago, a ellos!
¡Santiago y cierra España! Tu blanco
y brioso corcel se impone, acriollado,
frente a aquellos que no quieren reconocerte.
Al fin los indios defienden tu estandarte,
con intuición alegórica y esotérica,
juntándose dos mundos en uno,
afianzando las columnas de Hércules,
tatuando jaguares en las espuelas
de los jinetes que buscan la gloria,
luego de que los Trece de la Fama,
partieran desde la isla del Gallo.
Santiago cabalga por los Andes.
Laus Deo! La Escuela Cusqueña da fe.
José Antonio Pancorvo Beingolea
desde el cielo pinta,
recordando sus balcones.
¡Ahora fijémonos en las nubes!
¡Santiago siempre por los Andes!
¡Santiago siempre con Pancorvo!
–Antonio Moreno Ruiz