Roca Barea nos trae a colación el origen y el asentamiento del relato propagandístico español a través de rivalidades políticas, «nacionalistas» y de la ruptura espiritual que «casualmente» sirvió de gran excusa para socavar buena parte de la estructura política imperial del Viejo Continente, para luego evolucionar a algo así como «norte vs. sur», y hasta hoy.
Pasen y vean: