Hemos aquí un tema polémico, incómodo y lleno de subjetivismo: El sentimiento de desprecio por España en particular y por lo hispano en general que algunos (no todos, valga la aclaración) utilizan en Sudamérica como una suerte de relación directa con sus ancestros italianos; con una idea más que idealizada de Italia, como si fuera un próspero estado milenario de raza pura frente a una España tercermundista e impura racialmente… Hasta un papa llegó a utilizar el epíteto de “moros y judíos” para denigrar a los españoles. Lo parezca o no, la actual Italia fue una de las cunas de la leyenda negra hispanófoba en tanto y en cuanto a que una parte de su población no aceptó de buena gana el dominio de la Corona de Aragón de Roma para abajo. Sin embargo, justo es decir que una buena parte de su población sí que la aceptó y a pesar de la Guerra de Sucesión Española que puso Europa patas arriba, hasta principios del siglo XIX, las relaciones con Parma y Nápoles fueron más que fluidas. En la misma Europa en la actualidad, las relaciones entre italianos y españoles son de un nivel prácticamente familiar; de hecho en España una de las comunidades inmigrantes que más y mejor ha crecido son los italianos y no es algo que venga de ahora; Sevilla y Cádiz son focos de abundante inmigración italiana desde el Medievo; de hecho, fueron una “minoría” mucho más influyente que gitanos o moriscos a pesar de que el romanticismo del XIX no se fijó en ellos como “hechos diferenciales”.
Sea como fuere, los que en Sudamérica azuzan esta supuesta rivalidad, no caen en la cuenta que los países que mayor herencia romana tenemos en Europa seguimos sin tener una alianza como Dios manda. Si existe un Grupo de Visegrado, ¿no podría existir una suerte de “Grupo Latino”? (eso sí, alejados de bonapartismos, válganos Dios).
¿Por qué, para qué y a quién beneficia este absurdo que va más allá de una mera rivalidad y que niega más de un milenio de historia en común?
Analizamos la complejidad de estos asuntos con el pana Emilio Acosta Ramos de Venezuela Provincial. ¡Pasen y vean!
*Sobre Venezuela Provincial: