Si bien hay quien pueda pensar que el testimonio de «Popeye» -sicario de confianza de Pablo Escobar- acerca de la implicación de Cuba en el narcotráfico pueda ser fantasioso o tendencioso; ello fue corroborado también por el teniente coronel Juan Reinaldo Sánchez, quien durante más de dos décadas formó parte del servicio de seguridad de Fidel Castro. Desencantado por las muchas cosas que vio, pudo exiliarse en Miami vía México y contar con pelos y señales las muchas contradicciones de la tiranía a la que había servido; entre ellas, la implicación directa de Fidel en el tráfico de drogas y su entendimiento con los mentados narcos colombianos.
Pasen y vean: