Gracias a José Antonio Crespo-Francés, entre otros, sabemos del verdadero e importante papel español en el actual y vasto territorio estadounidense. Desde los primeros exploradores y conquistadores que fueron abriendo caminos, pioneros de la Acción de Gracias, de las alcaldías, los fuertes, la agricultura y la dramaturgia; en resumidas cuentas, la forja de una civilización que se prolongó durante los siglos; llegando a la inestimable ayuda de la Monarquía Hispánica (a través de la España europea y la Nueva España, contando con Cuba y Puerto Rico) para la independencia del que a posteriori se revelaría como coloso del norte.
No se entienden los Estados Unidos sin el aporte histórico, cultural y vital de España, y fue el presidente Kennedy quien hace muchos años así se atrevió a decirlo. Con todo, parece que esta ineludible memoria vuelve, y aunque haya que trabajar mucho en ello, ya por lo menos se dan pasos importantes al respecto.
Pasen y vean:
