Entre lirios, buganvillas,
cal, piedra y azulejos,
voy soñando con castillos
románticos sin tiempo.
Como me parece reparto,
elementos a mi antojo,
sobre pilares de Roma,
lo mudéjar, lo gótico y lo barroco,
se entrevera cual capricho
de armonía desordenada,
como rosas extendiendo
su perfume de gala.
¿Serán castillos en el aire?
¡Sabrá Dios lo que será!
¡Ojalá todo fuera leer y
escribir sin parar! ¡Ojalá!