La izquierda genera problemas sociales

-Por Gonzalo Alba Beteré

Que no nos engañen más. Ésta es la realidad:

LA IZQUIERDA GENERA PROBLEMAS SOCIALES.

La progresía, que abarca desde el centro izquierda de Ciudadanos hasta la extrema izquierda de Podemos, ERC o Bildu, es maestra en el arte de engañar a incautos, a pobres de espíritu y de intelecto.

Su herramienta: el engaño. Su estrategia, la creación de sentimientos « exclusivos » de la izquierda, que genera auténticos hooligans que relegan el pensamiento crítico ante la fuerza del sentir de un hincha. Así, mientras la derecha trata de hacer pensar a la gente (en números, en impuestos, en presupuestos, en balanzas comerciales, en empleo…), la izquierda les hace sentir. Y les repiten hasta la saciedad que ellos son el progreso, y ¿quién no quiere progresar en la vida? Y les repiten que ellos defienden a los más humildes, y ¿quién no estaría de acuerdo con eso? Y les repiten que son pacifistas, que abogan por el diálogo, que defienden la igualdad de género, que propugnan el derecho a la vivienda, la acogida humanitaria a la inmigración, la defensa del menor, etcétera, etcétera, etcétera. Y añaden: « y la derecha, todo lo contrario ».

Con esta argucia, generan el sentimiento de que ser de izquierdas es sinónimo de defender la justicia social, y ser de derechas es atentar contra ella. Generan sentimientos a flor de piel como el del hincha futbolístico que nunca reconocerá que su defensa le ha roto la pierna al atacante contrario.

Pero nada más lejos de la realidad. La izquierda no soluciona problemas sociales, sino que los genera. Se autoerige en adalides de la lucha social, en realidad no paran de generar problemas sociales.

Luchan supuestamente por los derechos de los alumnos, y en realidad consiguen que éstos puedan agredir a los profesores, mofarse de su autoridad y pasar de curso sin aprobar.

Luchan supuestamente por el derecho a la vivienda y lo que consiguen realmente es que familias trabajadoras puedan ver sus viviendas okupadas por maleantes con total impunidad.

Luchan supuestamente por los derechos de los menas y consiguen realmente que barrios enteros vivan atemorizados por éstos, envalentonados por la sobreprotección del estado.

Luchan supuestamente por los derechos de la inmigración ilegal, y consiguen realmente un efecto llamada que provoca situaciones como las de Canarias, el Maresme, Lepe o el poniente almeriense. La gente tiene que abrir los ojos.

Luchan por un estado enorme, capaz de solucionar todos los problemas del ciudadano y consiguen realmente una carga fiscal altísima sobre el ahorro, sobre los autónomos y sobre las empresas, que finalmente acarrea menos inversión, menos empleo y más pobreza. Y cada vez son más los comedores sociales y las colas para conseguir comida, pero no son comedores gestionados por sus sindicatos o sus chiringuitos, no. Son gestionados por la Iglesia, o por instituciones privadas que, a pesar de los ataques de la izquierda, tratan de solucionsr los problemas que ésta genera.

La izquierda no es progreso, sino regresión. No es avance social, sino generadora de problemas sociales. Que no te engañen. La izquierda actual es una pantomima para que piquen quienes se creen que pueden vivir en el mundo de libertades de Yupi, de una paguita eterna y sin tener que doblarla jamás.

La inteligencia no es patrimonio de la derecha, pero en la izquierda escasea, al menos entre sus votantes. No escasea entre sus dirigentes, que esos sí que se lo han montado bien, a base de engañar borregos.