El bufete de abogados DobleR (retorno a las raíces), especializado en temas de nacionalidad, en concreto con la ley 52/7 conocida por el público como ‘Ley de Nietos’ o de ‘Memoria Histórica’, ha publicado un artículo en el portal oficial del grupo. El mismo explica las razones por las cuales la posibilidad de que se apruebe una ley de descendientes, como la que decayó en la pasada legislatura, tiene un futuro cada vez más incierto.
Para DobleR, ni siquiera es posible esperar que los socialistas, si es que llegan a formar gobierno, vuelvan a reactivar la iniciativa senatorial que presentara en su día Sara Vilà Galán el año pasado. Recordemos que este proyecto de ley, -apoyado por todos los grupos representados en el Senado-, no concluyó el trámite legislativo por las trabas impuestas por los propios socialistas en la Comisión de Leyes del Congreso.
La gran verdad es que antes de que concluyera la pasada legislatura el Grupo Popular de la Comisión de Leyes liderado por Ana Belén Vázquez Blanco, dispuso de varios días antes de que se cerrase la Cámara para sacar adelante el proyecto, pero prefirió dejarlo pasar. Lo ocurrido durante esa fatídica semana lo contamos en el artículo ¿Quién dijo que todo está perdido?, así es que no vamos a repetirlo.
Las razones de esta tibieza las apunta muy bien DobleR: el tema de la suerte de la diáspora no interesa a la clase política peninsular más allá del postureo buenista que precede a cada elección. Es evidente que, al no tener representación parlamentaria, los españoles en el exterior no tienen fuerza político-legal para lograr un consenso acerca de los derechos conculcados a los emigrantes y sus familias a través del tiempo. Si alguna voz tenía la diáspora, ésta les fue arrebata por la reforma de la Ley Electoral de 2011, la misma que socialistas y pepeístas aprobaron de consuno, para evitar que el voto exterior (que cojea por la izquierda radical), influyera de manera decisiva en la vida política nacional.
Hoy ese engendro ha provocado que el voto exterior -que solía girar en torno a un 40% de participación-, haya caído hasta el 8% en las últimas elecciones generales.
El artículo de DobleR resulta interesante por muchas razones. La primera de ellas es el de colocar en perspectiva el problema de la nacionalidad española. Para este bufete y otras consultorías de abogados como el Grupo ARISTEO, el Código Civil vigente en España -que regula este asunto- no responde a las necesidades actuales de la sociedad. Todos los especialistas convienen en que es necesario legislar definitivamente sobre el tema de la nacionalidad para acabar con los “parches” legales que aquejan actual legislación aprobada en el siglo XIX.
Los abogados especializados en los temas de extranjería convienen en la urgencia de la implementación de una ‘Ley de descendientes’ sin caducidad en el tiempo, y que permita el acceso a la nacionalidad española de todo aquel que prueba demostrar su filiación con un emigrante nacido en España.
¿Cuáles serían los supuestos de esta ley según DobleR?
- Podrá obtener la nacionalidad española los hijos/as y nietos/as de emigrante español/a si se prueba documentalmente la filiación. El derecho no tendrá caducidad en el tiempo.
- La nacionalidad española no se pierde a no ser por declaración escrita de renuncia a tal condición. Todas aquellas personas que hayan obtenido la nacionalidad por sus padres o abuelos y que residan en el extranjero, podrán renunciar a la nacionalidad mediante declaración escrita en cualquier momento que así lo soliciten.
- El cónyuge extranjero de ciudadano/a español/a podrá adquirir la nacionalidad española cuando resida legalmente durante al menos seis meses en el territorio español, cuando tengan descendencia común dentro del Matrimonio o después de cinco años de la fecha del mismo, si no ha habido disolución, anulación o cesación de los efectos civiles y si no subsiste separación legal.
- Será impedimento para la adquisición de la nacionalidad española por el artículo primero de este proyecto, la condena firme por delitos graves contenidos en la legislación española.
- El Ministerio de Justicia establecerá el procedimiento para la inscripción fuera de plazo de aquellos ciudadanos españoles/as emigrantes cuyos documentos registrales (del registro civil y parroquiales) hayan sido destruidos durante la Guerra Civil española u otra catástrofe reconocida. Dichas inscripciones podrán acreditar la nacionalidad española del emigrante a los efectos del derecho de obtención de la nacionalidad española.
Un proyecto de esta naturaleza, resolvería naturalmente los cuatro supuestos que incluía la propuesta de Ley de PODEMOS:
- Los nietos de aquellas españolas de origen, nacidas en España, y casadas con un no español antes de la entrada en vigencia de la Constitución 1978, debido a que aquellas no transmitían la nacionalidad con anterioridad a la Carta Magna, y que perdían su nacionalidad al contraer matrimonio con un no español, salvo en el caso de las madres solteras o emigradas por cuestiones políticas.
- Los hijos mayores de edad de quienes obtuvieron la nacionalidad de origen mediante la Ley 52/2007, generándose divisiones en el seno de las familias, ya que unos hijos sí la poseen y otros no, debido a que únicamente se beneficiaron los hijos menores de edad.
- Los nietos de español/a nacionalizado/a en el país de acogida por cuestiones económicas antes del nacimiento de su hijo/a,
- Y los nietos de español/a que habiendo ostentando la nacionalidad la han perdido por no ratificar su deseo de conservarla al cumplir su mayoría de edad.
El caso de Cuba
Los abogados de DobleR tienen una vinculación particular con la isla. A través del tiempo, han conseguido organizar una eficaz red de colaboradores que ayudan a los españoles de Cuba a resolver entuertos con la administración española, pero sobre todo a mantenerlos informados sobre la vida de la comunidad de descendientes, ninguneada por España y abusada por sus “representantes”; la mayoría de ellos, al servicio de la dictadura habanera. También disponen de un activo grupo en Facebook (con más de 50 mil miembros) que suelen compartir sus vicisitudes personales y que buscan asesoría legal. En algún momento habrá que seleccionar algunos testimonios para denunciar ante la justicia los desmanes que se cometen a diario en el Consulado de España en Cuba.
Pero volvamos al tema principal de este artículo. A pesar de que coincidimos con el diagnóstico de los abogados españoles sobre el tema de la reforma del acceso a la nacionalidad española, debemos reiterar que ninguno de esos letrados expone abiertamente el problema principal que explica la falta de interés de la clase política española por el tema de su diáspora: El día en que los descendientes de españoles puedan obtener la nacionalidad demostrando la filiación sin límite en el tiempo, cambiaría la faz de la humanidad. De un plumazo, y sólo para empezar, España podría recuperar a Cuba sin disparar un tiro.
Necesitamos políticos valientes capaces de encarar nuestro ‘Destino Manifiesto’. La actual decisión de incluir este asunto en el programa electoral de la formación Democracia y libertad Popular, liderada por Sara González, va por el buen camino. ¿Pero para cuándo alguien el Partido Popular o de Ciudadanos? Ni siquiera VOX, favorable a una inmigración hispanoamericana ha llegado tan lejos.
Nosotros desde ‘Españoles de Cuba’ continuaremos defendiendo esta idea como el primer paso de un proyecto más vasto: la reconstrucción de la Hispanidad.