Habida cuenta de que por la llamada « Ley de Violencia de Género » se acabó la presunción de inocencia en España, la injusticia no ha hecho sino ir cuesta abajo, de culo y sin frenos, dando pábulo a las más sangrantes picarescas mientras que los auténticos maltratadores y violadores campan a sus anchas.
Hasta hace muy poco, este tema era tabú, pero son tantas las familias afectadas por las denuncias falsas y por la agresividad del falso feminismo como enésimo eructo postmarxista que en absoluto representa a las mujeres, sino a intereses ideológicos de millonarias multinacionales que no respetan ni la ley ni la cordura, pretendiendo que todo varón es un criminal en potencia porque sí.
Pasen y vean: