¿Trump o Biden? ¿Qué le conviene más a Latinoamérica?

-Por Alberto Gil Quispe

Ambos candidatos consideran que Venezuela debe recuperar su democracia y que los Estados Unidos deben liderar esa cruzada y que para ello se tendrá que utilizar todas las herramientas diplomáticas a su alcance para lograr el objetivo pero la manera que Trump plantea difiere de Biden con una política de máxima presión mientras Biden propone el empoderamiento del pueblo venezolano además de otorgar asilo Temporal a ciudadanos de este país sudamericano.

En el caso de Cuba Biden ofrece una política más parecida a la de Obama realizando el empoderamiento del pueblo Cubano, aminorando sanciones y embargos que nada sirvieron en su momento realizando una apertura diplomática la misma que Trump por su lado rechaza categóricamente.

Biden a diferencia de Trump considera humanizar el sistema migratorio través de la defensa del derecho legal a pedir asilo.

La visión de Trump es la de resguardar el país priorizando a los estadounidenses frente a los migrantes a través de una migración basada en méritos poniendo filtros a estos mientras Biden piensa en los migrantes como una pieza clave para la mano de obra en estados unidos y claves para la economía del país solicitando ser bienvenidos por la comunidad.

Biden propone incrementar los fondos de ayuda a los países latinoamericanos ya que considera que los otorgados por la administración Trump son insuficientes.

Quizás esto supondría pensar que lo más positivo para Latinoamérica sería un triunfo de Biden pero no se puede estimar lo mismo para los propios Estadounidenses en lo que a su economía se refiere.

Todavía tenemos presente la campaña que Estados Unidos realizó en contra de México, la renegociación de NAFTA y  las políticas anticuadas hacia Cuba y Venezuela y ahora el coronavirus, que han cambiado las relaciones entre Estados Unidos y sus vecinos  Latino americanos, y que no será fácil de revertir si gana Biden en noviembre.

Un gobierno de Biden tendrá que deshacerse de lo peor de la presente administración, pero también tendrá que repensar las políticas del pasado en cuanto a la región.

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