¿Por qué a nadie le importan los archivos de españoles en Cuba?

Hace algunas semanas, el diario en línea El Confidencial publicaba un articulo titulado “Un Tesoro de la emigración se pudre en el archivo de la embajada en Cuba”, donde se trataba del deterioro que sufre la memoria de los españoles en la isla por la desidia del Estado. Según el autor, Pablo López, “miles de documentos se pudren en un sucio almacén plagado de roedores”. El texto que fue reproducido por diferentes portales especializados en el tema cubano también ha encontrado eco en el Congreso de los diputados, donde varias formaciones políticas han interrogado al gobierno sobre este asunto, sin que hasta el momento se haya recibido una respuesta.
El primero en abrir el fuego ha sido el portavoz de Ciudadanos, Fernando Maura, que en su “Exposición de motivos”, señala el alcance del desastre: “La mayor parte de los documentos depositados en el archivo serian papeles de la emigración española a Cuba durante principios del siglo XX y la dictadura franquista, principalmente fichas de identificación”. La argumentación de Maura asegura, que también existirían informes sobre las repercusiones económicas que tuvo la llegada del castrismo sobre esta comunidad en la isla.
Todas las iniciativas que se han llevado a cabo para preservar estos documentos han resultado infructuosas.
La formación política de Alberto Rivera se ha interesado en el pasado por el tema de los españoles de Cuba, y también sobre la situación mas general de los derechos humanos que conciernen a todos los cubanos, pero es la primera vez que destaca cifras sobre la cantidad de ciudadanos que allí residen. En efecto, según el Padrón de Residentes (PERE) de este año en la isla residen oficialmente 139.851 españoles lo que hace que esta comunidad sea la segunda mas numerosa, tras Argentina, en Hispanoamérica. Si se considera que todavía no se han tratado todos los expedientes de nacionalidad, en los próximos meses, los españoles de Cuba llegarían a convertirse en el colectivo mas importante de nacionales residentes fuera de España.
Por su parte el Grupo Confederal Unidos Podemos, también ha presentado una pregunta escrita al gobierno. Su autor, el diputado Pablo Bustinduy Amador, recuerda que en 1949 el gobierno español ordenó a todas sus misiones en el extranjero que enviasen al Archivo General de la administración todas esas informaciones, y que ya en aquel entonces, se había observado que toda esa información (comprendiendo el periodo 1905-1969), había llegado muy deteriorada. Unidos Podemos, no solo se interesa en las medidas que el gobierno tomaría para la preservación de esa memoria, sino que quiere saber en que lugar se guarda y conserva la ya recibida, así como en las modalidades y condiciones para su consulta.
El tema de la conservación de los archivos españoles en Cuba, no solo interesa desde el punto de vista de la memoria histórica, sino que reviste una importancia capital en estos días, cuando el Congreso de los Diputados de España se apresta a votar una nueva ley de nacionalidad, pues los posibles nuevos beneficiarios, podrían encontrar en estos apolillados padrones la documentación necesaria para hacer valer sus derechos a la ciudadanía española. Algo que los gobiernos peninsulares, así como el régimen de La Habana, tratan de evitar por todos los medios a su alcance, aunque esto suponga la destrucción definitiva de dichos registros.

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