La Junta General del Principado de Asturias (JGPA) ha aprobado en la sesión plenaria del viernes 23 de marzo la nueva Ley de los Asturianos en el Exterior y del Reconocimiento de Asturianía. La norma contó con el apoyo de todos los grupos con representación en la Cámara.
Esta nueva ley, tras ser tramitada en comisión, ha sido presentada por el consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, el socialista Guillermo Martínez, quien ha dicho que la nueva ley “refleja fielmente las transformaciones sociales y económica de las últimas tres décadas”, además de contemplar realidades como el retorno y la nueva emigración.
Asimismo, el consejero ha señalado que en la elaboración de esta norma “nuestra prioridad siempre se ha sustentado en la convicción de que las personas emigrantes constituyen y han de ser consideradas un auténtico patrimonio para el Principado de Asturias por sus vínculos con su tierra de origen y con la de sus padres y madres en el caso de los descendientes, que a su vez les convierten en un recurso fundamental para la proyección de nuestra comunidad en el exterior”.
Trabajo consensuado
Ha agradecido Martínez que esta nueva ley “es fruto del trabajo y de las aportaciones de los emigrantes, de los centros y casas de Asturias, de la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA) y de los colectivos de personas retornadas”. También ha agradecido el trabajo del resto de grupos políticos para sacar adelante la norma, que ha calificado de “éxito colectivo” y en cuya elaboración “todos han cedido y aportado para enriquecer y mejorar el articulado de este marco legal”.
El consejero ha destacado que esta norma “refuerza plenamente nuestros compromisos con las colectividades asentadas en todo el mundo” y “convierte las políticas del Gobierno de Asturias en materia de emigración en obligaciones con carácter permanente, en particular los programas de ayuda económica y de bienestar social en favor de personas con escasos recursos y en situación de vulnerabilidad”.
Ha explicado que la ley preserva e impulsa los derechos de las comunidades asturianas y asegura su asistencia sanitaria durante los periodos de estancia en Asturias. Afecta a cerca de 140.000 asturianos asentados en el exterior y personas retornadas, y al centenar de centros asturianos, casas de Asturias y asociaciones con reconocimiento de asturianía en los cinco continentes.
Contenido
Por otra parte, añadió que la nueva norma promueve programas de intercambio cultural, educativo y económico dirigidos en especial a las personas jóvenes descendientes de emigrantes. Determina el régimen jurídico de reconocimiento de la asturianía, los derechos y obligaciones asociadas a este derecho, y los supuestos de revocación. Desarrolla las competencias del Consejo de Comunidades y amplía su composición dotando a este órgano de mayor pluralidad.
El retorno también está incluido en esta ley que garantiza medidas de apoyo económico y asistencia social al colectivo. Asimismo, reconoce a la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA) como interlocutor de referencia de las comunidades asturianas del exterior.
Otra novedad será la creación de un nuevo Registro de la Emigración así como la consolidación de los programas que ya venía desarrollando el Gobierno del Principado como los congresos mundiales de asturianía, la convocatoria anual de la Escuela de Asturianía y la elaboración, cada cuatro años, de un Plan Integral de Emigración.
Esta nueva ley, tras ser tramitada en comisión, ha sido presentada por el consejero de Presidencia y Participación Ciudadana, el socialista Guillermo Martínez, quien ha dicho que la nueva ley “refleja fielmente las transformaciones sociales y económica de las últimas tres décadas”, además de contemplar realidades como el retorno y la nueva emigración.
Asimismo, el consejero ha señalado que en la elaboración de esta norma “nuestra prioridad siempre se ha sustentado en la convicción de que las personas emigrantes constituyen y han de ser consideradas un auténtico patrimonio para el Principado de Asturias por sus vínculos con su tierra de origen y con la de sus padres y madres en el caso de los descendientes, que a su vez les convierten en un recurso fundamental para la proyección de nuestra comunidad en el exterior”.
Trabajo consensuado
Ha agradecido Martínez que esta nueva ley “es fruto del trabajo y de las aportaciones de los emigrantes, de los centros y casas de Asturias, de la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA) y de los colectivos de personas retornadas”. También ha agradecido el trabajo del resto de grupos políticos para sacar adelante la norma, que ha calificado de “éxito colectivo” y en cuya elaboración “todos han cedido y aportado para enriquecer y mejorar el articulado de este marco legal”.
El consejero ha destacado que esta norma “refuerza plenamente nuestros compromisos con las colectividades asentadas en todo el mundo” y “convierte las políticas del Gobierno de Asturias en materia de emigración en obligaciones con carácter permanente, en particular los programas de ayuda económica y de bienestar social en favor de personas con escasos recursos y en situación de vulnerabilidad”.
Ha explicado que la ley preserva e impulsa los derechos de las comunidades asturianas y asegura su asistencia sanitaria durante los periodos de estancia en Asturias. Afecta a cerca de 140.000 asturianos asentados en el exterior y personas retornadas, y al centenar de centros asturianos, casas de Asturias y asociaciones con reconocimiento de asturianía en los cinco continentes.
Contenido
Por otra parte, añadió que la nueva norma promueve programas de intercambio cultural, educativo y económico dirigidos en especial a las personas jóvenes descendientes de emigrantes. Determina el régimen jurídico de reconocimiento de la asturianía, los derechos y obligaciones asociadas a este derecho, y los supuestos de revocación. Desarrolla las competencias del Consejo de Comunidades y amplía su composición dotando a este órgano de mayor pluralidad.
El retorno también está incluido en esta ley que garantiza medidas de apoyo económico y asistencia social al colectivo. Asimismo, reconoce a la Federación Internacional de Centros Asturianos (FICA) como interlocutor de referencia de las comunidades asturianas del exterior.
Otra novedad será la creación de un nuevo Registro de la Emigración así como la consolidación de los programas que ya venía desarrollando el Gobierno del Principado como los congresos mundiales de asturianía, la convocatoria anual de la Escuela de Asturianía y la elaboración, cada cuatro años, de un Plan Integral de Emigración.
