Al castrismo le quedan doscientos años más con La Chambelona y San Nicolás del Peladero.
Excelente el reconocimiento a Cary Roque y a Ángel de Fana.
Anunció la promesa de una Cuba libre, ¿sin los Castro, supongo? Lo que ya es hora y toca desde hace rato. Restricción total del negocete con los militares castristas, faltaría más. Prohibición sobre el turismo, a ver si es verdad. Medidas con la intención de crear empresas privadas para empoderar a los cubanos, ¿cuáles cubanos, cuáles medidas, sin pasar por el régimen castrista? Sigan con lo del empoderamiento a los cubanos de Cuba, que a quienes hay que empoderar es a los exiliados radicales. Muy bueno el reconocimiento a los 4 pilotos asesinados de Hermanos al Rescate, pero el numerito era de esperar. También pidió liberación de presos políticos y elecciones libres, etcétera y demás.
Solo de violín. Tremendo violín que nos metió, a la altura de los sanacos que somos.
Rosa María Payá no saludó el himno norteamericano -bueno… será porque ella dice y jura y perjura que vive en Cuba.
Nada sobre la liberación de Eduardo Arocena, y sobre drones mucho menos.
Ah, y me recuerda alguien por allá abajo que se mantiene la cláusula de la derogación de los pies… Yatúsabe. ¿Y por fin Cuba vuelve a la lista de países terroristas o eso sigue tan vigente como lo impuso Obama, o sea, fuera de la lista de países terroristas? No quedó claro.
Señores, al castrismo le quedan doscientos años más con La Chambelona y San Nicolás del Peladero, ahora añádanle al guarapo el programita aquel que este señor conducía televisivamente, y sigan batuqueando al son del reguetón de turno.
Lo único positivo con lo que me quedo es con el reconocimiento muy merecido a Cary Roque y a Ángel de Fana por un presidente norteamericano. Punto pelota.
Lo que trajo la Moñeta Colorá y el Alambrito Amelcochao.
Zoé Valdés.