Lo anuncia con una foto del Ché a sus espaldas
El actual plusmarquista mundial de salto de altura ya tiene la nacionalidad española, que había sido aprobada el pasado julio por el Gobierno de España
El exatleta cubano Javier Sotomayor, plusmarquista mundial de salto de altura, rubricó hoy en la Embajada de España en La Habana la concesión de la nacionalidad española, aprobada por el Consejo de Ministros el pasado julio.
En un acto encabezado por el embajador de España en la isla, Francisco Montalbán, Sotomayor firmó el documento donde jura fidelidad al Rey y obediencia a la Constitución y a las leyes españolas como exige el procedimiento para estos casos, después de que el cónsul general de España en Cuba, Jorge Montenegro, leyera el Real Decreto con la concesión de la nacionalidad.
Dos meses de trámite
A finales de julio, el Consejo de Ministros del Gobierno español aprobó otorgar la nacionalidad española por carta de naturaleza a Sotomayor -entre otros deportistas-, quien conservará también su nacionalidad cubana.
Considerado el mejor saltador de altura de todos los tiempos, Sotomayor dice sentirse muy contento con lo que considera «un reconocimiento», ya que la mayoría de sus grandes resultados y sus récord mundiales de 2,43 y 2,45 metros los logró en suelo español.
En España, se convirtió además en el primer deportista latinoamericano en ser galardonado, en 1993, con el premio Príncipe de Asturias, «el premio fuera de los estadios que con mayor orgullo y mimo guardo», según dijo.
Un palmarés envidiable
Javier Sotomayor (Limonar, Cuba, 1967) está ya retirado pero sigue siendo el actual plusmarquista mundial de salto de altura tanto en pista cubierta (2,43), como al aire libre (2,45) y fue campeón olímpico en Barcelona en 1992. Superó el récord mundial en tres ocasiones, 2,43 en Salamanca, 2,44 en La Habana, y 2,45 nuevamente en Salamanca en 1993, siendo el único saltador de altura en la historia que ha superado la barrera anglosajona de los 8 pies.
Sotomayor es el saltador que más veces ha franqueado el listón por encima de 2,40 en la historia, en un total de 17 ocasiones
