- Se disparan las Denegaciones de Expedientes en La Habana que llevaban casi 10 años esperando su resolución.
Tres meses han transcurrido desde que comenzara a funcionar el nuevo servicio, que permite consultar el estado de la tramitación de la nacionalidad española por la ley 52/7 o de “Nietos” como es bien conocida en Cuba.
LEY MEMORIA HISTORICA. Nuestro servicio de información "on line" para conocer el estado de tramitación de un expediente de nacionalidad ha recibido más de 70.000 consultas en 3 meses https://t.co/t7dNLuU8oH
— ConsEspLaHabana (@ConsEspLaHabana) 27 de junio de 2019
La iniciativa consular, introducida gracias al empeño del nuevo cónsul de España, Carlos Pérez Desoy, ha permitido a miles de cubanos de dentro y fuera de la isla, conocer el punto exacto en que se encuentran sus solicitudes; muchas de las cuales siguen en trámite diez años después de haber iniciado el proceso en 2007.
Aunque el servicio funciona, y eso hay que agradecerlo, muchos de los desafortunados aspirantes a la nacionalidad española se han enterado del rechazo a sus solicitudes mucho tiempo después de haber sido denegados, lo que les impide hacer la reclamación gratuita correspondiente ante la Dirección de Registro Civil y del Notariado.
Algunos bufetes de abogados en España han denunciado que el número de denegaciones se ha disparado, desde que la administración ha decidido terminar con un proceso legal ya concluido hace varios años en otros países de Iberoamérica. Contrasta el interés de los letrados con el silencio del Consejo de Residentes Españoles en la isla que, no sólo no se ha sumado a la iniciativa de otras estructuras similares en el continente que están pidiendo la aprobación de una nueva ley de descendientes, sino que tampoco ha denunciado esta situación que afecta a los españoles de Cuba que asegura representar y defender.
La presidenta a del Consejo, María A. Rabanillo, debería organizar menos meriendas en La Habana y exigir a las autoridades españolas explicaciones por estas denegaciones masivas, que ahondan la división que la ley 52/7 creo entre los españoles residentes en la isla. Es su trabajo. Ha sido electa y nombrada para servir de interlocutora entre la administración y la creciente comunidad española residente.