La vida millonaria de la dictadura castrista

Dice el sabio refranero hispánico que «consejos vendo que para mí no tengo». Siendo más burdos, podemos acompañarlo de «a papá mono no le vengas con plátanos verdes» y «tus sermones, para mis cojones». Mientras el pueblo cubano parece miseria y opresión desde hace sesenta años, el régimen que lo sojuzga se da una vida de lujo y placeres que ya quisieran muchos ricachones del llamado «primer mundo». Y mientras tanto, muchos pijoprogres europeos y norteamericanos apoyando esto; pero eso sí, ninguno se va a vivir a un país comunista…

Toda una industria de la hipocresía.

Pasen y vean:

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