El gobierno español acaba de emitir más de 3.300 residencias para los venezolanos que solicitaban asilo político. Con la aprobación masiva de casos, el gobierno español intenta regularizar lo antes posible los 50.000 solicitantes que esperan por una regularización.
El gobierno de España ha comenzado la aprobación exprés de las residencias a venezolanos que habían solicitado asilo político y protección internacional. El ministerio de Interior, presidido por Fernando Grande Marlaska, ha comenzado a trabajar con un nuevo sistema para agilizar las solicitudes de venezolanos. Ahora, de forma casi automática, los venezolanos que hayan solicitado asilo político obtendrán la residencia por razones humanitarias, que les otorga permiso de residencia y trabajo durante, al menos, un año, prorrogable a dos. El gobierno español sólo ha reconocido en julio a 21 venezolanos con estatus de asilados políticos. El resto tendrán permiso de trabajo durante un año por “razones humanitarias”.
La comisión interministerial de asilo y refugio (CIAR) aprobó en julio un total de 3.334 nuevas residencias para venezolanos, según confirmó a ‘Magazine Español’ el Ministerio del Interior de España. Esta cifra se suma a los más de 7.000 expedientes que resolvió de forma favorable desde la aprobación del visado por razones humanitarias en marzo pasado.
De este modo, más de 10.000 venezolanos han obtenido el permiso de trabajo y residencia tras la aprobación de la residencia humanitaria, una figura legal impulsada por plataformas de venezolanos en Madrid para regularizar la creciente cantidad de venezolanos que llegan a España por la crisis venezolana. Los solicitantes de asilo entre 2014 y 2019 tienen derecho a la obtención de este visado.
Miles de residencias humanitarias, pocos asilos
De los miles de solicitantes de asilo político, el gobierno sólo ha reconocido tal condición a 21 ciudadanos venezolanos en el mes de julio, de acuerdo con las cifras del ministerio. La inmensa mayoría de solicitudes se descartan como persecución política, ya que los solicitantes deben demostrar una actividad política notoria para adquirir ese reconocimiento. No basta con haber acudido a manifestaciones contra el régimen de Nicolás Maduro Moros o haber sido víctima de los colectivos chavistas, como argumentan muchos solicitantes. Los trabajadores sociales explican que muchas de las solicitudes tienen la exposición de motivos y la argumentación copiadas literalmente de solicitudes anteriores. La administración ha detectado hasta una especie de ‘plantilla’ que va pasando entre los solicitantes de asilo político. Todas estas solicitudes serán rechazadas de forma automática.
Antes, el rechazo venía acompañado de una orden de expulsión. Pero tras la aprobación del visado por causas humanitarias, el rechazo del asilo viene acompañado de una resolución mucho más esperanzadora: la entrega de un visado por razones humanitarias que implica un permiso de trabajo.
Hasta 2016, las cifras de solicitudes de asilo político de venezolanos no eran particularmente relevantes. Pero ese año, el gobierno español registró más de 4.000 solicitudes. La cifra se disparó hasta más de 10.000 solicitudes en 2.017 y alcanzó las 18.000 el año pasado. Este año, el gobierno ha recibido esa misma cantidad en apenas un semestre. Por ello, este año podrían presentarse más de 30.000 solicitudes de este tipo.
Desde el gobierno español reconocen que “hay voluntad” para desatascar todas esas solicitudes de forma rápida y expedita, como no se había hecho hasta ahora. A partir de la aprobación, los solicitantes deberán solicitar cita para tramitar su documento nacional de identidad con su nueva condición migratoria.
El ministerio de Interior ha modificado la aplicación informática para agilizar la respuesta a los venezolanos solicitantes de asilo que hasta ahora mantenían colapsados los trámites de extranjería.
Hasta 720 euros mensuales en ayudas
Los refugiados que estaban en trámites de asilo y que habían recibido atenciones y ayudas de ONG reciben hasta 720 euros mensuales en ayudas para el alquiler y la manutención. Las ayudas expiran el mismo día en que son informados de su nuevo estatus migratorio. Una vez recibido el permiso de residencia y trabajo, ya no tienen derecho a esas ayudas.