El universo visual de Víctor Moscoso en el MUSAC

León, 10 de noviembre de 2021.

Querida Ofelia,

MUSAC, Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León, inaugura el sábado 13 de noviembre Moscoso Cosmos. El universo visual de Victor Moscoso¸ la mayor exposición retrospectiva del autor en España hasta la fecha, en la que se presenta una amplia selección del trabajo de uno de los diseñadores gráficos más originales e influyentes del siglo XX. La muestra, que podrá verse en León hasta el 20 de febrero, ha sido producida junto a la Fundación Luis Seoane (La Coruña) y el Centro Niemeyer (Avilés) y cuenta con el apoyo de Acción Cultural Española y GADIS.

Moscoso, nacido en Vilaboa (La Coruña), criado en Brooklyn (Nueva York) y formado en la prestigiosa escuela Cooper Union de arte público y más tarde en la Universidad de Yale -donde recibió clases del maestro de la Bauhaus Josef Albers-, es una de las figuras clave en el movimiento contracultural de los años 60 en Estados Unidos. Junto a otros nombres como Wes Wilson, Rick Griffin, Stanley Mouse o Alton Kelley, Moscoso marcó un giro en el lenguaje visual del siglo XX a través de sus dos principales facetas: el diseño de carteles de rock psicodélico y de publicidad, y la producción de cómics underground. Su arriesgado lenguaje, basado en la rotulación distorsionada e ilegible realizada a mano, las imágenes descontextualizadas y el contraste cromático agresivo, puso en jaque los dogmas del diseño gráfico moderno y su influencia reverbera aún hoy en día.

La exposición Moscoso cosmos, comisariada por David Carballal, incluye una extensa selección de obra gráfica original de Victor Moscoso — procedente fundamentalmente de la colección del Concello da Coruña, la mayor colección pública del artista en Europa—, la proyección de sus animaciones y una sala dedicada a sus espectaculares carteles cinéticos, además de otros elementos que ayudan a comprender las particulares aportaciones y método de trabajo del artista. Entre las obras en exposición se encuentra su célebre serie de carteles de rock psicodélico realizados en apenas ocho meses durante los años 1966 y 1967, así como catorce números de la revista underground Zap Comix, editada a partir de 1968 y a lo largo de más de cuarenta años.

Junto a estos dos ejes se incluye una selección de carteles, cubiertas de discos, cómics, ilustraciones para libros y revistas, animaciones y fotografías biográficas que completan un recorrido marcado por imágenes icónicas de la segunda mitad del siglo XX, por las que Moscoso recibió el premio Augustus Saint-Gauden de Cooper Union y en 2018 la medalla AIGA, uno de los galardones más reconocidos en el ámbito del diseño gráfico, así como dos premios Clio, uno de los más prestigiosos galardones de publicidad a nivel internacional.

Sus obras forman parte de las colecciones permanentes del MoMA de Nueva York, la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos en Washington D. C. o el Victoria & Albert Museum de Londres, entre otros. Maestros como Milton Glaser le consideran “el más original e ingenioso dentro del género” y su obra se revisa constantemente en nuevas exposiciones, antologías o ensayos. Sin embargo, él ha vivido ajeno a galerías y agencias durante el último medio siglo. Se considera a sí mismo un «artista comercial», pero es difícil imaginar a un creador actuando con mayor libertad. Actualmente, a sus ochenta y cinco años, Victor Moscoso sigue dibujando, haciendo collages o pintando en su pequeño estudio en el Valle de San Gerónimo (California).

La muestra Moscoso cosmos se completa con una publicación homónima, la monografía más extensa sobre Victor Moscoso a día de hoy, que cuenta con la dirección de arte del propio autor.

APARTADOS DE LA EXPOSICIÓN

De Vilaboa a San Francisco

Victor Moscoso nace en Vilaboa (La Coruña) el 28 de julio de 1936, apenas dos semanas después del alzamiento militar contra la República que dio origen a la Guerra civil. Durante la contienda su madre, Casilda García, se fue a vivir con el pequeño Victor a la casa de su abuelo Manolo en Oleiros. Fue en esta granja donde se formaron sus primeros recuerdos: paseos a caballo con su primo; un lagarto cruzando el río en que su madre lavaba la ropa; el palomar de la casa de su abuelo; el enorme fuego de la lareira… El padre de Victor, José Moscoso, había nacido en Nueva Jersey, hijo de padres emigrantes. Finalizada la guerra, en 1939, decidió hacer el viaje de vuelta a Estados Unidos. Un año después, en marzo de 1940, Casilda viaja con Victor hacia Nueva York a bordo del Saturnia. “Mi primer recuerdo de Nueva York no es la Estatua de la Libertad, es un enorme tanque de gasóleo en los muelles”.

Trasplantado repentinamente al asfalto de Brooklyn, solo podía encontrar vestigios de su primer entorno en los árboles de las aceras o en las visitas a Coney Island. Pero Nueva York le ofreció también el acceso a la cultura pop. En Nueva York, Moscoso descubre la magia de los dibujos animados en el estreno de Mr Bug Goes to Town en 1942, un largometraje de los hermanos Fleischer. Pronto se convierte en uno ávido lector de cómics: Carl Barks y Walt Kelly para Disney, las tiras de Barney Baxter en el Daily Mirror, Jingle Jangle de George Carlson, Steve Canyon de Milton Caniff, Dick Tracy de Chester Gould o Sheena de Jerry Iger. Cuando descubrió que el dibujo podía convertirse en una manera de ganarse la vida, nació su vocación.

Pasando por Yale

Sus padres lo apoyan en su intención de ingresar en la High School of Industrial Art en Manhattan, y allí estudiará hasta 1954. Continúa su formación en la Cooper Union, una prestigiosa escuela de arte público. “Tuve mucha suerte de que fuera así, porque la mayor parte del oficio que aprendí lo aprendí en Cooper Union, y allí decidí que no quería ser un artista comercial. Yo quería ser eso que llaman artista plástico, un pintor de caballete”.

En 1957 se matricula en la Yale School of Art, donde asistirá a las clases sobre interacción del color de Josef Albers, el maestro de la Bauhaus. Su enseñanza es clave para entender lo que será su posterior obra psicodélica. La lectura de On the Road había despertado ya su curiosidad por la escena beat de la Costa Oeste, pero saber de la llamada escuela de pintura figurativa de la Bahía supuso el impulso definitivo para dejar Nueva York. Moscoso viaja por primera vez a Berkeley en 1959 y se instala en San Francisco un año después para comenzar su carrera como pintor.

Neon Rose

Entre 1961 y 1965 Moscoso realiza varias exposiciones de pintura en California. Las críticas son buenas, pero las ventas le obligan a compaginar diferentes empleos. Uno de esos trabajos dará un feliz giro a su carrera. A finales de 1965 comienza a surgir en San Francisco el movimiento psicodélico, con bandas como The Charlatans, Jefferson Airplane, Big Brother and the Holding Company o GratefulDead. En paralelo a la escena musical aparece también una nueva escena visual: los carteles de jóvenes diseñadores como Wes Wilson o Stanley Mouse captaron inmediatamente la atención de Victor Moscoso, que comprendió intuitivamente que algo histórico estaba a punto de ocurrir. Hacia finales de 1966 abandona la pintura para dedicarse en exclusiva al diseño de carteles de eventos psicodélicos con su propia compañía, Neon Rose. Durante los siguientes ocho meses, que desembocarán en el Verano del Amor, trabaja a un ritmo frenético creando dos o tres carteles a la semana para salas como The Avalon Ballroom o The Matrix. El arriesgado lenguaje visual de esta serie, basada en la rotulación casi ilegible, las imágenes descontextualizadas y el contraste cromático agresivo, puso rostro a la devastadora ola contracultural que estaba surgiendo en San Francisco.

The Big Five

Los cinco principales diseñadores de carteles psicodélicos —Wes Wilson, Alton Kelley, Stanley Mouse, Rick Griffin y Victor Moscoso— fueron bautizados por la prensa como The Big Five [Los cinco grandes]. En plena efervescencia del Verano del Amor celebraron la Joint Show, una exposición para la que cada uno de ellos realizó un cartel específico. Los más de 3.000 asistentes a la inauguración aquel 17 de julio de 1967 llegaron a bloquear las calles que llevaban a la Moore Gallery de San Francisco. “Fue un momento cumbre. Yo solía leer en los libros de arte sobre Art Nouveau, el Renacimiento, la Secesión vienesa, Picasso en París, cosas así, y me decía «Dios… cómo me gustaría haber nacido esas épocas». Y, mira tú por dónde, ¡fui a acabar en una de esas épocas!”. En septiembre de 1967 la revista Life publica el artículo “The Great Poster Wave”, en el que Victor Moscoso aparece destacado. Unos meses después, en enero de 1968, el MoMA de Nueva York revisa en la exposición Word and Image la historia del cartel desde el movimiento Art Nouveau a través de 300 piezas, entre las que se incluyen trabajos de Victor Moscoso.

Surfin’ con Griffin

Moscoso vio por primera vez a Rick Griffin en las oficinas de FamilyDog durante la primavera del 67. “Vi a este tipo que parecía Jesucristo, con una carpeta en el regazo. Y me dije, «¡Jesucristo, ahí está con una carpeta en el regazo!»”. Enseguida se hicieron buenos amigos y llegaron a realizar seis carteles juntos. Hacia abril de 1968 ya habían comenzado a trabajar en un álbum conjunto de historietas psicodélicas en color, una especie de ramificación de los carteles en que cada uno dibujaba sus viñetas de manera independiente para después intercalarlas sin seguir ningún hilo argumental. “Todas las colaboraciones que hice con Rick Griffin fueron tan fluidas… Me sigue pareciendo increíble lo bien que trabajábamos juntos. A veces, cuando colaborábamos, volvíamos sobre nuestros dibujos y no éramos capaces de decir quién había hecho qué”.

Zap Comix & Co.

Robert Crumb fue uno de los jóvenes que viajó a San Francisco atraído por los carteles psicodélicos. En febrero de 1968 comenzó a distribuir por Haight-Ashbury el primer número de ZapComix, una pequeña revista compuesta enteramente por sus viñetas. En busca de colaboradores para el segundo número, se puso en contacto con el dibujante S. Clay Wilson y también con Rick Griffin y Victor Moscoso. “Cuando Gail y yo fuimos a Nueva York en el 67, vi algún trabajo de Crumb, como Life Among the Constipated. No sabía decir si era un viejo que dibujaba como un joven, o un joven que dibujaba como un viejo. Era como los cómics de antes, pero puesto de ácido”. Moscoso no se lo pensó dos veces cuando vio la primera entrega de Zap. El formato era perfecto: impreso en papel offset a una tinta, el precio de producción permitiría hacer una gran tirada para venderlo a solo 50 centavos. Si Crumb y S. Clay Wilson abordaban descarnadamente temas tabú para otras publicaciones, Griffin y Moscoso se permitieron inaugurar un nuevo metalenguaje del cómic. Durante los siguientes cuarenta años, los miembros de Zap publicaron sin someterse a otro juicio que el de sus numerosos lectores.

Off the Wall

La firma de Victor Moscoso es sinónimo de psicodelia, pero eso no significa que su trabajo se haya limitado al ámbito musical. Sus carteles han anunciado emisoras de radio, tiendas de ropa, compañías de cosméticos, cineastas, recitales de poesía, obras de teatro, campañas públicas y, por supuesto, sus propias exposiciones. Todos tienen algo en común: después de cumplir su efímera misión publicitaria, permanecen como imágenes inolvidables y abiertas a múltiples interpretaciones.

Poster Dance

Moscoso no tardó en explorar la interacción entre las tintas de sus carteles y las luces de colores, imprescindibles en cualquier evento psicodélico. En mayo del 67 realiza un cartel en el que sobreimprime dos fotogramas de una bailarina: uno en rojo y el otro en azul. Cuando el póster se expone a luz roja/verde intermitente, las dos imágenes aparecen y desaparecen —filtrándose alternativamente—, produciendo un efecto de movimiento. “Howard Hesseman me dijo: «Victor, en ese cartel que hiciste para The Doors, la mujer vuela». En cuanto lo dijo, supe lo que había hecho; la primera vez fue por puro accidente”.

La cubierta de Zap nº 13 iba a ser obra de Rick Griffin, pero en 1991 fallece tras sufrir un accidente de motocicleta. Crumb pide entonces a Moscoso que sea él quien realice el diseño, y Victor le rinde un homenaje a su amigo haciendo una versión de la portada de Rick Griffin para Tales from The Tube (1972). En la magnífica cubierta de Moscoso, las dos olas —el agua y el fuego, el ángel y el diablo— se citan dibujando un corazón sobre el atardecer californiano. “Fue uno de los artistas más talentosos con los que me crucé. Sigo echándolo de menos”.

PUBLICACIÓN

Junto a la exposición se ha editado Moscoso Cosmos, un libro en tres idiomas (español, inglés, gallego) con dirección de arte del propio Victor Moscoso. Incluye una introducción del crítico neoyorkino Steven Heller y un ensayo biográfico de David Carballal, comisario de la exposición, escrito tras una larga serie de conversaciones con el artista. Se trata de la monografía más extensa sobre Victor Moscoso a día de hoy, con cerca de 200 imágenes entre obra en catálogo, documentación y fotografías biográficas.

VICTOR MOSCOSO. NOTA BIOGRÁFICA

Victor Moscoso nace en la localidad coruñesa de Vilaboa en 1936 y se traslada junto a sus padres al barrio de Brooklyn en la ciudad de Nueva York en 1940. Se forma como diseñador y artista en el Industrial Art Institute de Manhattan, en la escuela Cooper Union y en la Escuela de Arte de la Universidad de Yale, donde fue alumno del maestro de la Bauhaus Josef Albers, cuyas enseñanzas acerca de la interacción del color serán fundamentales en su obra como grafista. Atraído por el movimiento beat, en el año 1959 Victor Moscoso viaja a la Costa Oeste, donde continúa sus estudios en el San Francisco Art Institute con Richard Diebenkorn y Nathan Oliveira. Se gradúa dos años después pasando a ser profesor de litografía con piedra. Aunque parecía llamado a convertirse en uno de los pintores de la segunda generación de la escuela figurativa de la Costa Oeste, su actividad como diseñador gráfico dará un giro feliz e inesperado a su carrera.

A finales de 1965 comienza a surgir en San Francisco el movimiento psicodélico. En paralelo a la nueva escena musical —con bandas como The Charlatans, Jefferson Airplane, Big Brother and the Holding Company o Grateful Dead— aparece también una nueva escena visual: los carteles de jóvenes diseñadores como Wes Wilson, Alton Kelley o Stanley Mouse captaron inmediatamente la atención de Victor Moscoso, que comprendió intuitivamente que algo histórico estaba a punto de ocurrir.

Hacia finales de 1966, abandona la pintura para dedicarse en exclusiva al diseño de carteles de rock psicodélico. Durante los siguientes ocho meses —que desembocarán en el Verano del Amor— Moscoso trabaja a un ritmo frenético creando dos o tres carteles de eventos a la semana para salas como The Avalon Ballroom o The Matrix. E

contracultural de finales de los sesenta en su vertiente más ácida y dio a conocer al mundo en tiempo real lo que estaba ocurriendo en San Francisco.

En 1968, mientras los mundos del arte y la moda empezaban a asimilar la nutritiva descarga, Moscoso abandona la escena para dedicarse —casi en exclusiva y con cuentagotas— al cómic underground, un campo en el que también inauguró caminos inexplorados. Junto a artistas como Robert Crumb, S. Clay Wilson o Rick Griffin, creó el colectivo Zap, que editaría la revista del mismo nombre durante los siguientes cuarenta años. Zap Comix fue un rompeolas en la lucha por la libertad de prensa en los Estados Unidos durante los años setenta y se convirtió en el proyecto más longevo y exitoso de cuantos salieron de la efervescente escena underground de la Costa Oeste.

DAVID CARBALLAL. NOTA BIOGRÁFICA

David Carballal (Santiago de Compostela, La Coruña, 1970) es licenciado en Bellas Artes y diseñador gráfico especializado en diseño editorial y comunicación corporativa. Ha diseñado colecciones de literatura, catálogos y monografías para diversas editoriales e instituciones. Ha impartido conferencias sobre arte y gráfica contemporánea. En 2017 comisarió para la Fundación Luis Seoane la exposición Cómo se imprime un libro. Grafistas e impresores en Buenos Aires 1936-1950, un recorrido por la historia de la gráfica editorial argentina en los años cuarenta. El proyecto, que daría lugar a una publicación del mismo nombre diseñada por el comisario de la muestra, se presentó posteriormente en el Museo Patio Herreriano de Valladolid, la sede del Instituto Cervantes de Madrid y el Museo Emilio Caraffa de Córdoba (Argentina).

INFORMACIÓN PRÁCTICA

Título de la exposición: Moscoso cosmos. El universo visual de Victor Moscoso

Artista: Victor Moscoso (Vilaboa, La Coruña, 1936) Comisariado: David Carballal

Diseño Juan de la Colina, Juan Gallego y Dolores Rodríguez

Fechas: 13 de noviembre de 2021 – 20 de febrero de 2022

Lugar: MUSAC. Sala 3

Producida por:

Fundación Luis Seoane (La Coruña)

Ayuntamiento de La Coruña

MUSAC, Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León

Centro Niemeyer (Avilés, Asturias)

Con el apoyo de:

Acción Cultural Española

GADIS

Dirección:

Avda. Reyes Leoneses, 24

24008 León.

Un gran abrazo desde nuestra querida y culta España,

Félix José Hernández.

Salir de la versión móvil