Descolonizando a Puerto Rico con su reunificación a España

INTRODUCCIÓN

Puerto Rico ha sido llamada la colonia más antigua del mundo. [i]Después de 500 años de gobierno colonial, primero español y luego estadounidense, la isla entra al nuevo milenio todavía buscando como definir su identidad política y nacional, en un entorno caracterizado por la falta de consenso interno, y sin la metrópolis sentir necesidad o interés en lograr una resolución final al problema del estatus. La confluencia de una serie de eventos y transformaciones en el ámbito internacional, al igual que en Puerto Rico, abren la posibilidad para una fórmula alternativa para lograr la descolonización de Puerto Rico: la opción española, o la reincorporación de la isla al Reino de España como Comunidad Autónoma. Regida por España desde el siglo XVI, Puerto Rico pasa a manos de los Estados Unidos en 1898 de acuerdo con los términos del Tratado de París, documento que pone fin a la Guerra Hispano-Americana.

La administración estadounidense que se estableció en la isla trajo consigo una nueva interpretación de las relaciones entre la metrópoli y sus colonias, y de cómo encajar la entidad puertorriqueña dentro de la sociedad estadounidense de la época, basada principalmente en la tradición del derecho anglo-sajón y los precedentes desarrollados durante las décadas de expansión territorial por el continente norteamericano. Ante esta nueva realidad, el liderato político puertorriqueño se divide en frentes ideológicos definidos primordialmente por las fórmulas de autogobierno propuestas como alternativa al régimen colonial impuesto por Washington: la autonomía (obtener mayor control local al mismo tiempo que se mantienen lazos permanentes con la metrópolis estadounidense); la anexión (incorporación de la isla como estado federado); y la independencia (soberanía propia, ya sea desligada jurídicamente de los EE UU ó en forma híbrida como protectorado). Estas diversas alternativas reflejan el idealismo nacionalista del siglo XIX, templado en la realidad pragmática enmarcada por los intereses de la metrópolis estadounidense.

Este artículo primero explorará las deficiencias de las alternativas tradicionalmente propuestas para la descolonización de Puerto Rico. En segundo lugar, se presentará el nuevo entorno jurídico y geopolítico que moldearán los procesos a usar por nacionalidades sin estado propio para lograr soberanía y autogobierno en el siglo XXI, haciendo énfasis en la disminución de poder del Estado nacional frente a organizaciones supranacionales, y a la descentralización administrativa. En tercer lugar, Puerto Rico continúa siendo en la actualidad una colonia de los Estados Unidos, ya que el Congreso retiene poderes plenarios sobre la isla; carece de soberanía propia; y los puertorriqueños carecen de participación efectiva en los procesos legislativos federales. En tercer lugar, se planteará que la reincorporación de Puerto Rico al Reino de España en calidad de Comunidad Autónoma, tal y como esta provisto por la Constitución Española del 1978, se presenta como una opción viable para lograr la descolonización de la isla. Se discutirá además la posición política, social, económica y geoestratégica de Puerto Rico como parte de España, al igual que las posibles ventajas que este nuevo status de Puerto Rico proveería a tanto a España, y a la Unión Europea, como a los Estados Unidos.

Continuará…

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