Confesiones de un ex agente castrista: Manual de los esbirros comunistas

A pesar de que los alegres pijoprogres europeos pinten al régimen castrista como una suerte de exótico paraíso; sin embargo, la realidad es muy otra, siendo un estado policial terrible vigilante de la miseria, la prostitución y otras plagas que atenazan desde hace ya sesenta años al sufrido pueblo cubano, el cual no tiene más alternativa que exiliarse o malvivir.

Hemos aquí el testimonio de un ex agente castrista que explica el control de la vida de las personas por parte de la dictadura; en aspectos cotidianos como la alimentación; siendo que en otros países, hasta los animales comen más sano y más abundante.

Las barbaridades que se están haciendo en la perla de las Antillas como gran campo de concentración prolongado hacia Venezuela merecen ser conocidas.

Basta de justificar lo injustificable y más desde los países ricos.

Pasen y vean:

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