Bolas en La Habana
Un rumor creciente recorre las calles de la capital de la desgraciada isla de Cuba: el consulado de España se aprestaría a dar citas para que los bisnietos excluidos por LMH inicien el trámite de nacionalidad española. No hay que decir que el pequeño mundo de los españoles de Cuba, y los miles que espiran a serlo, se ha puesto en zafarrancho de combate. Por eso desde hace días, circulan en las redes sociales informaciones del más variopinto color, incluyendo el día y la hora en que se producirá el tan esperado acontecimiento.
Es cierto que las frustraciones son numerosas. Muchos de los que tenían derecho a recuperar la nacionalidad española por Ley de Memoria Histórica no hicieron los trámites hace 10 años por falta de información u otras razones, pero como la Ley no tenía vigencia permanente, cuando quisieron reaccionar ya era demasiado tarde. Todos los que seguimos este tema, sabemos que existen muchas familias de varios miembros donde un sólo nieto pidió recuperar la nacionalidad española.
Hace 10 años, los que no eran candidatos a la emigración, no veían la utilidad de un pasaporte de la Unión Europea; sin embargo, las reformas económicas de Raúl Castro han facilitado el surgimiento de un incipiente sector privado que, para poder funcionar, necesita el acarreo de mercancías del exterior, una parcela de la miseria que han ocupado naturalmente los felices posesores del pasaporte español de todas las edades. Los mismos, para ganarse la vida, se han convertido en expertos en viajar a todas partes del mundo para importar insumos que el mercado interno no es capaz de proporcionar. Se dice que el patriotismo es padre de la necesidad, y en el caso de Cuba la bandera de España tiene viento en popa desde hace varios años gracias a “las mulas”.
Otros aspirantes a europeos con sandunga son los hijos mayores, y los nietos de las abuelas a los que la Ley nunca permitió el acceso a la nacionalidad. Es fácil imaginar que dada la degradación de las condiciones materiales de los isleños, que han empeorado por la ineficiencia del régimen, pero también por la nefasta serie de cataclismos naturales que han afectado el territorio este año, una nueva Ley de Nietos vendría como anillo al dedo a tanto candidato a poner mar de por medio a aquella porquería flotante.
Sin embargo, lamentamos decepcionar a nuestros lectores: El consulado de España en La Habana no tiene instrucciones de nada, simplemente porque no hay ninguna Ley en vigor que lo permita. Hace algunos meses explicábamos porque no habría Ley de nietos en la presente legislatura. Con todo puede que estuviéramos equivocados, pues desde hace 15 días los destinos de la Península se encuentran entre las manos de un socialista que se ha manifestado repetidamente, mientras estuvo en la oposición, a favor de los derechos de los descendientes de españoles en el exterior. No hay razones pues, para oponerse al trámite parlamentario de la propuesta de PODEMOS del año 2016, que ha sido postergada sin razones válidas porque Pablo Iglesias y sus amiguetes tenían otras prioridades, entre las que no se encontraban los nietos, como lo demostró hace poco en Buenos Aires el futuro padre de mellizos, y feliz propietario de una casita con piscina en las afueras de Madrid.
En abril del año pasado, los socialistas habían presentado una nueva proposición de Ley de Memoria, que incluía beneficios para algunos nietos, pero la retiraron por falta de apoyos. Y aunque nada les impide volverla a presentar, creemos que carecen de tiempo, y que al igual que el Grupo Confederal de PODEMOS, tienen otras prioridades por delante, más aún, cuando el voto de los emigrantes importa poco, tras la fatídica reforma electoral (aprobada por ellos mismos) que les arrebató ese derecho en 2012. De todas maneras esta proposición de Ley socialista, no restaura todos los derechos confiscados a los hijos de emigrantes, sólo a las víctimas de la Guerra Civil.
Hace 15 días la formación de Izquierda Unida presentó una propuesta de Ley muy similar a la de PODEMOS en el Senado, pero todavía se encuentra en trámite de aprobación, sin olvidar que en esa Cámara, el Partido Popular es mayoría, y ya rechazó el año pasado una iniciativa que expuso la senadora de Foro Asturias, Rosa Domínguez de Posada, por considerar dicho partido, que “ya se había hecho más que suficiente” en materia de derechos a los emigrantes españoles. En fin, que por ese lado no hay nada que esperar. Por todo lo antes expuesto se deduce que si hay Ley antes de que se agote la legislatura, está tendrá que venir forzosamente desde el Congreso, donde sólo falta presentar la que ya está aceptada a trámite desde 2016. El escenario de elecciones anticipadas antes de los previsto puede presentarse en cualquier momento; sobre todo si Sánchez por “razones humanitarias”, continúa aceptando buques atiborrados de emigrantes subsaharianos, o sigue permitiendo que los ayuntamientos retiren cruces cristianas de los parques a diestra y siniestra.
Esto es lo que hay queridos amiguitos: Una propuesta de Ley aplazada y otra en trámite. Por esa razón, y otras que no vienen al caso; en este momento no hay materia legal que permita a los descendientes de españoles excluidos de la LMH puedan llenar solicitud alguna en el consulado de España en La Habana; más aun cuando sabemos que hasta ahora han sido incapaces de resolver los 80 mil expedientes que siguen en trámite, algunos desde al año 2009. Por esa razón la información que aparece en la Web de Exteriores sigue vigente:
La proposición de ley sobre concesión de la nacionalidad a los descendientes de españoles, conocida como «Ley de bisnietos» presentada en el Congreso español, no está en vigor, por lo que, no es posible actualmente proceder a la tramitación de la nacionalidad española en virtud de su aplicación.